El agua se está convirtiendo en un recurso cada vez más escaso, y esto representa un riesgo creciente para la producción de las empresas.
Muchas empresas consideran que los costes del agua son muy bajos, ya que la mayoría de estas empresas solo consideran la factura que reciben por el suministro de agua dulce, incluso un coste prácticamente nulo para autoabastecimientos. Las inversiones en proyectos específicos de resiliencia del agua a menudo no reciben suficiente apoyo por parte de los órganos de toma de decisiones y se posponen.
Se necesita un cambio hacia la gestión circular del agua como base para una gestión sostenible del agua. Las empresas que piensan en gestionar de mejor forma sus suministros de agua y buscan activamente la cooperación con otros usuarios de agua garantizan un clima operativo más estable. Apoyando no solo la producción sino también construyendo una imagen positiva de la empresa para sus clientes ya que la gestión circular de recursos es uno de los pilares que aportan valor añadido a las empresas.
Empresas ante el ODS 6
El Objetivo de Desarrollo Sostenible 6 de las Naciones Unidas es “Garantizar la disponibilidad de agua y su gestión sostenible y el saneamiento para todos”.
Las empresas juegan un rol clave en este sentido, debiendo gestionar de forma sostenible los recursos hídricos disponibles en el entorno que son utilizados para la creación, producción y distribución de sus productos y servicios.
Hay determinadas empresas cuyo núcleo de negocio está más directamente ligado a este Objetivo, como las del sector químico o las del sector agroalimentario. No obstante, todas las empresas, independientemente de su sector, pueden tomar medidas para contribuir a este ODS.
Nuestro enfoque para la gestión sostenible del agua
Son muchas las empresas a las que hemos ayudado a trabajar con un enfoque de gestión sostenible del agua. Hacer que sus fábricas sean más eficientes, evaluar la esencia del agua para sus operaciones, evaluar sus inversiones en agua y aumentar la conciencia sobre el agua como tema clave para las operaciones de estas empresas son algunas de las claves.
Ejemplos de acciones y soluciones clave:
- Priorizar la eficiencia del agua en todas las operaciones mediante la instalación de tecnologías con mejores prácticas para la conservación del agua. Reducir su consumo en la medida de lo posible.
- Mitigar la contaminación del agua evitando su contaminación o utilizando procesos de tratamiento de aguas residuales de última generación para la descarga de efluentes.
- Desarrollar procesos de fabricación innovadores que eliminen las sustancias con alto potencial de contaminación del agua y las sustituyan por materiales más fáciles de eliminar de los efluentes.
- Invertir en la recirculación de aguas aptas en escorrentías agrícolas, industriales, etc… y utilizarla como fuente de agua dulce.
- Tomar medidas para mejorar la gestión del agua a través de todo el ciclo de vida de los productos.
- Desarrollar y utilizar tecnologías para el control de datos, ahorro, recuperación y reutilización agua.
- Reducir la probabilidad de contaminación del agua subterránea al tratar y procesar todos los desechos generados en una actividad industrial, tanto sólidos como líquidos.
- Reducir o evitar el uso de productos químicos y materiales que puedan ser particularmente perjudiciales para la calidad del agua si se eliminan de forma incorrecta.
El agua dulce es vital para la vida y, sin embargo, es un recurso finito. Es por ello que es muy importante recuperar el equilibrio entre el consumo de agua dulce y su renovación natural.
